BBVA ha fijado un nuevo objetivo de canalización de negocio sostenible de 700.000 millones de euros desde 2025 hasta 2029. Supone más que duplicar el anterior de 300.000 millones de euros del periodo 2018-2025.
«En BBVA seguimos considerando la sostenibilidad como una prioridad estratégica, un importante motor de crecimiento diferencial. Creemos que la oportunidad de negocio en esta segunda parte de la década estará impulsada por una fuerte inversión en infraestructuras y por el avanzado nivel de madurez de algunas de las nuevas tecnologías limpias, que permitirá ―a muchas de las que todavía no lo son― hacerlas rentables», ha manifestado el director global de Sostenibilidad y Banca Corporativa y de Inversión de BBVA, Javier Rodríguez Soler.
La entidad financiera ha realizado este anuncio en el marco de la presentación a sus empleados y empleadas del nuevo plan estratégico para los próximos cinco años. Así, este banco miembro del Foro por Madrid, más que duplicará, hasta los 700.000 millones de euros, el anterior objetivo de negocio sostenible de 300.000 millones de euros del periodo 2018-2025. Este nuevo objetivo, más ambicioso, se plantea además para un periodo más corto (cinco años frente a ocho).
La canalización de negocio sostenible en BBVA incluye aspectos relacionados con el cambio climático y el capital natural ― que comprende actividades vinculadas a agua, agricultura y economía circular―, así como la promoción y financiación de iniciativas sociales que incluyen: infraestructuras sociales, educativas, de salud, etc; apoyo a emprendedores y empresas jóvenes; y la inclusión financiera de los colectivos más desfavorecidos.
En 2018 el banco anunció que canalizaría 100.000 millones de euros en negocio sostenible en el periodo 2018-2025. Una cifra que la entidad incrementó en dos ocasiones hasta los 300.000 millones de euros. Desde enero de 2018 y hasta diciembre de 2024, BBVA ha canalizado un total de 304.000 millones de euros en negocio sostenible, alcanzando un año antes de lo previsto dicho objetivo.
El 78% del importe correspondió a canalización relacionada con la mitigación y adaptación al cambio climático y la preservación del capital natural, y el 22% con el crecimiento inclusivo.